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Porque mi perro se lame las patas

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cachorro border collie dos patas

Si tu perro se lame las patas con frecuencia, descubre las posibles causas, desde alergias hasta estrés, y aprende cómo ayudarlo con soluciones efectivas.

Si has notado que tu perro se lame las patas con frecuencia, es natural que te preocupes y te preguntes si este comportamiento es normal o si indica un problema de salud. Aunque es común que los perros se limpien ocasionalmente lamiéndose las patas, cuando este comportamiento se vuelve excesivo o persistente, puede ser señal de un problema subyacente.

El lamido compulsivo puede estar relacionado con diversas causas, desde alergias e infecciones hasta problemas emocionales como el estrés o la ansiedad. Comprender el motivo detrás de esta conducta es fundamental para garantizar el bienestar de tu mascota y aplicar las soluciones adecuadas.

A continuación, analizamos en profundidad por qué los perros se lamen las patas, qué síntomas pueden alertarnos de un problema mayor y qué medidas tomar para evitar complicaciones a largo plazo.

Porque mi perro se lame las patas: 5 razones

1. Alergias: una de las causas más frecuentes

Las alergias son una de las razones más comunes por las que un perro puede lamerse excesivamente las patas. Existen diferentes tipos de alergias que pueden provocar picazón e irritación en la piel:

  • Alergias ambientales, causadas por el polen, los ácaros del polvo o productos químicos presentes en el hogar.
  • Alergias alimentarias, derivadas de ciertos ingredientes en la dieta del perro, como el trigo, la soja, el pollo o los lácteos.
  • Alergias por contacto, originadas por el contacto con superficies irritantes como césped tratado con pesticidas, productos de limpieza o tejidos sintéticos.

Cuando un perro tiene una reacción alérgica, es posible que sus patas se enrojezcan, se hinchen o presenten descamación. En estos casos, el lamido es una respuesta natural para intentar aliviar la incomodidad, pero puede empeorar la inflamación si no se trata adecuadamente.

Si sospechas que las alergias pueden estar afectando a tu perro, es recomendable consultar al veterinario para identificar el alérgeno y ajustar la alimentación o el entorno del perro.

2. Problemas en la piel: infecciones y hongos

Las infecciones en la piel también pueden provocar picazón intensa y molestias, haciendo que el perro se lama constantemente en un intento de aliviar la irritación.

Las infecciones bacterianas pueden desarrollarse si hay una herida, un arañazo o un rasguño en la pata, especialmente si el perro camina por terrenos sucios. En otros casos, la humedad acumulada entre los dedos puede favorecer el crecimiento de hongos, causando enrojecimiento, mal olor y un lamido persistente.

Si notas que las patas de tu perro tienen olor fuerte, cambios en la textura de la piel, inflamación o secreción, es importante acudir al veterinario lo antes posible para recibir tratamiento. En muchos casos, se requiere el uso de antibióticos o antifúngicos para eliminar la infección.

perrito saluda con su pata

3. Dolor o lesiones: una respuesta al malestar físico

Si tu perro comienza a lamerse una sola pata de manera repentina y constante, puede estar experimentando dolor localizado en esa área.

Entre las posibles causas de dolor en las patas se encuentran:

  • Cortes, espinas o piedras pequeñas incrustadas en las almohadillas.
  • Uñas rotas o demasiado largas, que pueden causar incomodidad al caminar.
  • Quemaduras en las almohadillas por caminar sobre superficies calientes como asfalto en verano.
  • Esguinces o fracturas menores en los dedos o articulaciones.

Es importante revisar cuidadosamente las patas del perro en busca de heridas, objetos extraños o signos de inflamación. Si el perro cojea o muestra signos de dolor al tocarle la pata, es recomendable acudir al veterinario para descartar lesiones graves.

4. Estrés, ansiedad o aburrimiento: el lamido como conducta compulsiva

Los perros también pueden desarrollar comportamientos compulsivos cuando experimentan estrés, ansiedad o aburrimiento. En estos casos, el lamido de las patas no es una respuesta a un problema físico, sino una forma de aliviar la ansiedad o liberar energía acumulada.

Los perros que pasan mucho tiempo solos, que no reciben suficiente actividad física o que han experimentado cambios en su entorno pueden recurrir al lamido repetitivo como una especie de hábito calmante.

Si el lamido parece estar relacionado con factores emocionales, es fundamental aumentar la estimulación mental y física del perro. Paseos más largos, juegos interactivos, sesiones de entrenamiento y compañía constante pueden ayudar a reducir el estrés y evitar el desarrollo de conductas compulsivas.

En casos de ansiedad severa, es recomendable consultar con un veterinario o un especialista en comportamiento canino para evaluar opciones de tratamiento, que pueden incluir terapias de modificación de conducta o, en algunos casos, el uso de suplementos naturales calmantes.

5. Presencia de parásitos: pulgas, garrapatas y ácaros

Los parásitos externos, como pulgas, garrapatas y ácaros, pueden causar una picazón insoportable en las patas del perro, lo que lleva a un lamido constante en un intento de aliviar la irritación.

Las pulgas suelen esconderse en zonas con poco pelo, como el área entre los dedos, mientras que las garrapatas pueden adherirse a la piel y causar inflamación localizada. Por otro lado, los ácaros de la sarna pueden provocar lesiones, enrojecimiento y una picazón extrema, afectando principalmente las patas, orejas y abdomen del perro.

Para prevenir este problema, es fundamental mantener al día el tratamiento antiparasitario del perro y revisar su piel regularmente en busca de signos de infestación. Si se detectan parásitos, el veterinario puede recomendar el tratamiento más adecuado para eliminarlos y aliviar el malestar.

perro descansa sobre su ama

Cómo prevenir el lamido excesivo en las patas

Para evitar que tu perro desarrolle el hábito de lamerse compulsivamente las patas, es importante adoptar algunas medidas de prevención y cuidado diario. Mantener una rutina de higiene adecuada, revisar las patas con frecuencia y garantizar un entorno seguro y estimulante son claves para evitar problemas a largo plazo.

Si el lamido se debe a una causa física, tratar la afección subyacente es la mejor manera de evitar que el perro siga lamiéndose. En casos de estrés o ansiedad, proporcionar un entorno tranquilo y suficiente actividad física y mental ayudará a reducir la necesidad de este comportamiento.

Si notas que tu perro sigue lamiéndose las patas de manera excesiva o presenta signos de irritación, inflamación o heridas, es fundamental consultar con un veterinario para recibir un diagnóstico preciso y evitar complicaciones.

El lamido de patas puede ser una señal de alerta

El lamido ocasional de las patas es una conducta natural en los perros, pero cuando se vuelve excesivo, puede ser indicativo de alergias, infecciones, dolor, parásitos o problemas emocionales. Identificar la causa es clave para aplicar la solución adecuada y garantizar el bienestar de tu mascota.

Mantener un monitoreo constante, proporcionar un entorno saludable y acudir al veterinario ante cualquier síntoma preocupante permitirá prevenir problemas mayores y asegurar que tu perro tenga una vida cómoda y feliz.


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Este artículo ha sido elaborado basándose en información de fuentes oficiales y confiables, garantizando su precisión y actualidad. Fuentes consultadas: American Kennel ClubRover.comKivetKaliboFour Paws.

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