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Cultura y sociedad

¿Cuándo actuará Fred Again en Madrid? Fecha y detalles útiles

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Cuándo actuará Fred Again en Madrid

Foto de Raph_PH vía Wikimedia Commons , bajo licencia CC BY 4.0

Fred again.. llega a IFEMA Madrid el 17 de octubre: 22.00–6.00, normas clave, accesos y ticket digital para una noche club única en Barajas.

Fred again.. actúa en Madrid el viernes 17 de octubre de 2025 en IFEMA Madrid (pabellón 6). El horario oficial fija la franja entre las 22.00 y las 6.00, con apertura de puertas a las 22.00 y cierre de accesos a las 6.45. La dirección exacta es avenida del Partenón, 5 (Barajas) y el aforo previsto ronda las 9.500 personas. Es un formato DJ set de larga duración: una noche pensada para la pista, más club que directo tradicional, con un despliegue técnico propio de gran recinto.

Hay reglas singulares que condicionan la experiencia y conviene interiorizar antes de ir. Está prohibido grabar: la organización entrega pegatinas para cubrir las cámaras del móvil en el acceso. No hay reentrada: quien salga del recinto, no vuelve a entrar. Las entradas son móviles y nominales, gestionadas en la app AccessTicket, y deben activarse en el teléfono; capturas o impresiones no sirven. La venta se abre hoy, martes 14 de octubre, tras un prerregistro exprés; el precio parte desde unos 70 euros más gastos y la demanda es altísima. El cartel anuncia, junto a Fred again.., Skin On Skin, DREA y Toccororo en clave 100% club.

Fecha, horario y ubicación: la hoja de ruta

El concierto queda fechado en 17 de octubre y se programa como una velada maratoniana, de 22.00 a 6.00. Son ocho horas de música, con margen real para que el DJ set respire, cambie de velocidad y juegue con los picos de energía sin la prisa de los festivales. La apertura de puertas a las 22.00 facilitará un acceso escalonado, aunque el tapón de última hora se repetirá: a las 6.45 el recinto echará el cierre, también de puertas. La ubicación, pabellón 6 de IFEMA, no es casual: techos altos, potencia eléctrica y logística de gran formato para una noche que mezcla club y producción de estadio.

El Distrito de Barajas activará un pequeño dispositivo de movilidad con posibles cortes en la avenida del Partenón durante el arranque del evento. Hay parking, sí, pero de pago y con cupo limitado; por eso las autoridades recomiendan transporte público y planificar la llegada con margen. Metro (L8, Feria de Madrid) deja literalmente en la puerta sur del recinto, y Cercanías (C-1, Valdebebas) queda a unos 35 minutos a pie. La N3 asoma como aliada en la vuelta nocturna. Alrededor operan también taxi y VTC con zonas de subida y bajada señalizadas. El objetivo es evitar cuellos de botella justo al acabar el set.

Entradas: venta, precio y condiciones de acceso

El acceso se estructura en dos tiempos. Primero, prerregistro: un formulario de interés que se abrió por tiempo limitado para filtrar la demanda y generar la cola virtual. Segundo, compra en la app AccessTicket: tickets nominales, vinculados a la identidad de la persona, con límite por usuario y activación obligatoria en el teléfono. No valen PDFs, ni impresiones, ni capturas, porque el control leerá únicamente el QR vivo de la app. Esta operativa, frecuente en grandes promotoras, busca agilizar accesos y frenar la reventa.

El precio se mueve desde aproximadamente 70 € + gastos, con posibles tramos por disponibilidad. En este tipo de anuncios relámpago, el cupo vuela. En el arranque del tour —primero Glasgow, luego Bruselas— los sold out fueron cosa de minutos. Madrid apunta en la misma dirección por tamaño de mercado y tracción del artista. Si hubiera liberación de entradas en última hora —incidencias de pago, movimientos de aforo—, volverá a suceder dentro de AccessTicket, no en pasarelas alternativas. Conviene tener app instalada, sesión iniciada y método de pago guardado antes de que se abra la ventana de compra: cuando salta la oportunidad, el margen para completar el proceso son minutos.

Nominalidad, transferencias y reventa: lo que aplica

La nominalidad implica que cada entrada lleva nombre y apellido. Si no se habilita transferencia en la propia app, no hay forma oficial de pasar un ticket a otra persona; cualquier otro método quedará fuera de norma. En acceso, el personal puede solicitar documento identificativo para comprobar que el nombre del QR coincide con quien entra. Es una tendencia consolidada en giras de gran demanda: reduce el fraude y da herramientas al promotor para cortar mercados de reventa que inflan precios y multiplican riesgos de estafa.

La reentrada está deshabilitada. La idea es clara: dentro del pabellón se concentra toda la experiencia hasta el final de la noche —zonas de comida, bebida y fumadores incluidas—, sin ese ir y venir que complica los pasillos y los controles. Para quien necesite medicación u otros objetos justificados, la recomendación habitual es documentarlo (receta, informe) y avisar en el propio control para que se gestione de forma segura.

Cómo llegar y salir de IFEMA sin perderse

Metro es la opción más directa: Línea 8 (Nuevos Ministerios–Aeropuerto T4), estación Feria de Madrid, cuya salida desemboca en la entrada sur del recinto ferial. Es un trayecto rápido desde el eje Nuevos Ministerios–Colombia–Mar de Cristal, con conexiones sencillas al resto de líneas. Cercanías aporta otra vía: Valdebebas (C-1), desde donde hay unos 35 minutos a pie hasta el pabellón 6, un paseo recto que a muchos les compensa por evitar aglomeraciones en el Metro posconcierto.

En autobús urbano (EMT) operan en las inmediaciones las líneas 73, 104, 112, 122 y el servicio especial SE 709 (Feria de Madrid–Hospital Isabel Zendal). Para la vuelta de madrugada, N3 cubre el eje Cibeles–Canillas con parada en el entorno del recinto. La línea interurbana 828 (Universidad Autónoma–Alcobendas–Feria de Madrid–Canillejas) suma otra alternativa desde el norte. Si la elección es taxi, hay varias paradas oficiales señalizadas alrededor (avenida del Partenón y avenida de la Capital de España). VTC tendrá puntos de recogida habilitados en calle Turín para ordenar el flujo de vehículos y facilitar la salida hacia M-11/M-40. Ojo: se exigirá servicio contratado; los vehículos sin reserva previa no podrán acceder al punto.

Quien apueste por coche encontrará unas 3.800 plazas de aparcamiento en los parkings violeta y amarillo de IFEMA, de pago. La entrada recomendada para aparcar discurre por Vía de Dublín y avenida del Partenón, y existe una zona “Kiss & Ride” en Vía de Dublín para subida y bajada rápida. Los accesos por Ribera del Sena permanecerán cerrados durante el evento. Hay plazas reservadas para personas con movilidad reducida y itinerarios accesibles en el interior del recinto.

En la última milla conviene lo de siempre: calzado cómodo, capa ligera para el fresco de la madrugada al salir a las seis, batería del móvil por encima del 50% (la app del ticket consume), y margen de tiempo suficiente para pasar control sin agobios. IFEMA, pese a su escala, es un recinto nítidamente señalizado; al pabellón 6 se entra desde avenida del Partenón. Conciertos de esta envergadura duplican la densidad de tráfico entre 22.00 y 0.00, cuando se concentran accesos y cuando empiezan los cortes puntuales de circulación en el entorno. Ir antes de las 23.00 aligera el control y da oxígeno si algo falla con la app o el método de pago.

Servicios y pequeños trucos de logística

Para comer y beber, el pabellón activa puestos interiores con pago electrónico. El efectivo pierde peso, aunque sigue habiendo cajas mixtas. En recintos de feria, el consumo medio se encarece frente a la calle. Quien quiera economizar, cena antes y ajusta dentro. Los puntos de agua y baños están señalizados; merece la pena identificarlos nada más entrar para evitar colas de última hora. La zona de fumadores se habilita en un área específica, separada de la pista y debidamente ventilada. Objetos prohibidos: como norma general, botellas y latas, aerosoles, punzantes, vidrio o palos de selfie, además de cualquier equipo de grabación; el personal de seguridad tiene autoridad para denegar acceso si detecta material no permitido.

Normas en el interior: móviles tapados, sin cámaras y sin reentrada

La regla más llamativa es no grabar. En el acceso se reparten pegatinas para cubrir las cámaras del teléfono. No es postureo: se vigila su cumplimiento y la idea es disfrutar del concierto sin pantallas. Ese pacto, por estricto que parezca, está detrás de la intensidad de la experiencia: la pista mira al escenario, no al móvil. No hay reentrada; quien sale, no vuelve. Es un criterio operativo —se evitan colas de recontrol— y una forma de que la música no se diluya en idas y vueltas a la calle.

Las entradas son nominales y digitales. El QR que se escanea vive en la app, no en una captura. Si el teléfono se queda sin batería, el control no podrá leer el código. Solución práctica: llevar power bank. La iluminación utilizará estrobos y flashes de alta intensidad. Para personas con fotosensibilidad, es un dato relevante: hay tramos del show con estímulos visuales muy potentes. En caso de emergencia o malestar, los puntos sanitarios se ubican en el perímetro del pabellón; la seguridad privada coordina con Policía Municipal y Samur-Protección Civil el protocolo habitual de grandes recintos.

Qué se puede y qué no se puede portar

Las mochilas pequeñas pasan sin problema tras revisión; las mochilas grandes o maletas pueden denegarse por seguridad y por logística del guardarropa. Bebidas del exterior, no. Medicinas personales, , en cantidades razonables y con justificante. Cámaras profesionales o objetivos de cierto tamaño, no; ni aunque se prometa no usarlos. Objetos punzantes, aerosoles o banderas con mástil rígido, no. La organización se reserva el derecho a ampliar la lista según evolucione el dispositivo del evento.

El concepto de la gira: 10 semanas, 10 canciones, 10 ciudades

Fred again.. encadena este otoño su concepto más ambicioso: “10 Weeks, 10 Songs, 10 Cities” —un capítulo por semana, una canción inédita por ciudad. La ruta arrancó fuerte y el tercer acto cae en Madrid. El productor británico promete estrenar aquí un tema nuevo, asociado a la noche y al espacio, que se integrará después en su proyecto “USB002”. Viene, además, con el eco fresco de “You’re a star”, la pieza que ha ido enseñando en lives y que ha puesto a enloquecer a foros y clubes; es el tipo de track que une emoción y pegada, marca de la casa.

La prohibición de grabar cobra sentido a la luz de ese concepto. No hay spoilers masivos, no hay vídeos granulados que adelanten el clímax del show; lo que pasa, pasa allí. Madrugada y secreto compartido. En ese marco, la presencia de Skin On Skin, DREA y Toccororo termina de cerrar el tono: ritmo crudo, bajo contundente y un tramado percusivo que mira a club australiano, techno latino y zonas híbridas donde Fred se siente cómodo. La ambición no es solo sonora: el diseño de luces y el sistema escogido para el pabellón 6 buscan presión física en la pista y nitidez en los pasajes más melódicos, esos que vuelven coreables incluso sin letras.

Qué esperar del set: dinámica, transiciones y momentos

La duración extendida permite tres movimientos reconocibles. Un arranque de tempo medio —espacio para texturas y reconocimiento de campo—, un tramo central que acelera y encadena los momentos de mayor impacto, y una caída final que elige entre el coro colectivo o la hipnosis a pulsos lentos. Fred es un constructor de estados: maneja el sample emocional con precisión quirúrgica y suelta los drops cuando siente la sala entregada. No es un recital de éxitos más orquestados; es club con sensibilidad pop, capaz de pasar de un piano mínimo a una batería de breaks sin romper el hilo. “Turn On the Lights again..”, “Adore u” o ese “Delilah (pull me out of this)” que incendia voces encajan junto a relecturas inesperadas y versiones que aparecen y desaparecen en segundos.

La acústica del pabellón, bien tratada, no compromete inteligibilidad; los subs van a trabajar y conviene pensarse la posición. Quien prefiera espacio para bailar encontrará zonas más oxigenadas en los márgenes delanteros; quien quiera impacto irá a centro-izquierda, donde la presión de graves dibuja el corazón del baile. Se agradece hidratarse sin esperar a tener sed y hacer pausas cortas en los pasillos laterales: ocho horas se hacen largas si no se dosifica.

Seguridad y movilidad: mapa mental para una noche larga

El Ayuntamiento activará refuerzos en el entorno de IFEMA y publicará incidencias en tiempo real durante la noche. Entre 22.00 y 24.00 son posibles cortes puntuales en avenida del Partenón desde la entrada principal hasta la glorieta de Hamburgo. Dentro, el promotor despliega un operativo de seguridad privada que coordina accesos, pistas, pasillos y salidas de emergencia. No hay misterio: todo va preparado para llenar y vaciar el pabellón 6 con orden. En el interior las rutas accesibles para personas con movilidad reducida están contempladas; fuera, hay 36 plazas PMR en aparcamiento.

Al terminar, la salida escalonada hacia L8, N3 y VTC/taxi reduce esperas. En Metro, la estación Feria de Madrid absorbe picos, pero los minutos críticos ocurren entre 6.00 y 6.30: conviene tener a mano alternativas (caminar hasta Mar de Cristal si existiera saturación puntual, por ejemplo) o combinar con VTC desde calle Turín, donde se ha marcado el punto de encuentro. El Kiss & Ride de Vía de Dublín funciona bien para recogidas pactadas; no es mala idea fijar punto de encuentro con antelación si se va en grupo.

Lo práctico que no se dice tanto

BiciMAD tiene estaciones próximas en avenida del Partenón 6 y 18: como opción de última milla, resuelve. Batería externa: imprescindible si se entra a las 23.00 y se sale al amanecer. Ropa por capas: dentro se baila, fuera de madrugada refresca. Tapones de oído: las SPL de un show así castigan; hay modelos reutilizables que filtran sin matar la experiencia. Punto sanitario: saber dónde está de antemano evita minutos tontos si alguien se marea. Efectivo: cada vez menos útil, pero puede salvar si un datáfono se cae. Descansos: dosificar es ganar la noche; el set no tendrá pausas “oficiales”, la pausa se la da cada uno.

Por qué esta fecha es diferente: contexto y expectativa

En Madrid, Fred again.. ya ha reventado plazas y expectativas. Lo singular ahora no es solo el tamaño del recinto o la hora, sino el marco creativo: una canción inédita por ciudad que se incorpora a USB002 y que convierte cada parada en pieza única dentro del relato de la gira. Esta lógica —estrenar en directo, atrapar el momento y congelarlo en un release posterior— explica la prohibición de grabar. En lugar de decenas de vídeos en redes, queda la memoria colectiva de la noche.

El cartel subraya esa intención. Skin On Skin aporta la fibra club de alto octanaje, DREA y Toccororo expanden el espectro: ritmos latinos de nueva ola, techno sin concesiones y una manera de entender la pista que encaja con la narrativa de Fred. En esta gira, el productor británico alterna melodías que se corean con breaks que muerden; el terreno perfecto para mezclas sorpresa, IDs y esos reworks que después medio mundo busca en foros. No es casual que cada semana el boca a boca multiplique el interés: quien va, sale con la sensación de haber visto algo irrepetible.

Hay un elemento logístico que también pesa: IFEMA permite un control absoluto del entorno. Accesos amplios, baños suficientes, seguridad visible y servicios dimensionados para la madrugada. No es el romanticismo de una sala pequeña, pero sí la comodidad de un recinto pensado para aguantar una noche entera a 8.000–10.000 personas sin colapsar. En noches así, esa comodidad vale oro.

Últimos apuntes para disfrutarlo de principio a fin

La fecha está ahí, marcada en rojo: viernes 17 de octubre, IFEMA Madrid, 22.00–6.00. La entrada digital y nominal vive en AccessTicket y tiene que estar activada. No se graba: pegatina en la cámara, móvil al bolsillo y pista. No hay reentrada: mejor entrar con todo resuelto. La llegada funciona con Metro (L8) y EMT; la vuelta combina N3, Metro y VTC/taxi en sus puntos asignados. Si se va en coche, parking de pago con entrada por Vía de Dublín y Kiss & Ride para recogidas. En caso de duda, las señales de IFEMA y el personal de seguridad conducen el flujo sin pérdidas.

El resto —lo que de verdad transforma la noche— ya no depende del mapa, sino de la música y de esa suspensión que Fred again.. maneja a su antojo. Ocho horas dan para mucho: euforia y calma, coros y silencios, ritmo recto y desvíos. Madrid va a escuchar una canción nueva que no existía antes; la escuchará a oscuras de móviles, en un pabellón 6 convertido en caja de resonancia. Suena grandilocuente, sí, pero hay fechas que se ganan el adjetivo. Esta lo tiene todo para hacerlo.


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Este artículo se ha elaborado a partir de fuentes oficiales y medios españoles con información vigente y contrastada. Fuentes consultadas: Ayuntamiento de Madrid, RTVE, IFEMA Madrid, Metro de Madrid, EMT Madrid, Primavera Sound.

Periodista con más de 20 años de experiencia, comprometido con la creación de contenidos de calidad y alto valor informativo. Su trabajo se basa en el rigor, la veracidad y el uso de fuentes siempre fiables y contrastadas.

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